¿Es correcto regalar una botella de vino?

Regalar una botella de condes albarei albarino o de otro vino similar es un acto muy común cuando vamos a cenar a casa de alguien o cuando queremos tener un detalle con una persona que nos ha hecho un favor y no sabemos qué comprarle porque no tenemos una gran confianza. Pero, en los últimos tiempos, se ha avivado la polémica sobre si es correcto regalar un producto que contiene alcohol.

Los que dicen que no es correcto regalar vino argumentan que hoy hay muchas personas que pertenecen a otras religiones, como los musulmanes, que tienen prohibido beber alcohol. Estas personas podrían interpretar como una falta de respeto este tipo de regalos. También dicen que, tal vez, podríamos estar regalando una botella de vino a una persona que está dejando de beber y que puede sentirse mal por el regalo. Pero, ¿tienen fuerza estos argumentos?

Desde nuestro punto de vista, regalar una botella de vino sigue siendo algo totalmente correcto, a no ser que sepamos a ciencia cierta que hay una razón para no hacerlo. Como hemos dicho, es un regalo común que se hace a personas que no se conoce demasiado, por lo que no podemos saber sus circunstancias. ¿Actuamos mal si regalamos bombones y resulta que la otra persona es diabética, intolerante a la lactosa o está a dieta? Pues no, siempre que no sepamos que existen estas circunstancias. 

Lo normal es que la persona que lo recibe entienda perfectamente que se trata de un detalle con la mejor intención. Y de la misma forma que si nos regalan un libro y ya lo tenemos o no nos gusta el autor, damos las gracias y nos limitamos a guardarlo o dárselo a otra persona, lo mismo ocurriría con la botella de vino. Y es que es imposible saber si alguien no bebe alcohol, no toma dulces o si es vegano o vegetariano. Nos volveríamos locos cada vez que tuviéramos que tener un detalle.

En las convenciones sociales hay que tener en cuenta a la mayoría. Si pensamos en las excepciones o en los casos personales, no podríamos regalar absolutamente nada. El mero hecho de regalar ya podría estar en contra de alguna norma o creencia personal. Por tanto, lo mejor es hacer el regalo que queremos hacer con total naturalidad y, prácticamente seguro, será aceptado del mismo modo y sin ningún problema.

Valle del Salnés, sede de importantes bodegas de Galicia

La del Salnés es una de las comarcas pontevedresas con mayor tradición vinícola, figurando entre las cinco subzonas que configuran la Denominación de Origen de las Rías Baixas. Son muchas las bodegas asentadas en este valle, cuna del albariño, siendo Condes de Albarei una de las más importantes.

 

Desde su fundación misma en 1988, los vinos bodega conde de albarei se posicionaron como un referente internacional, logrando en pocos años galardones tan relevantes como la medalla de oro del Challenge International du Vin celebrado en Burdeos. Tres décadas después de esta primera conquista fuera del territorio nacional, los caldos de esta bodega se comercializan en países tan alejados como Japón, México o Estados Unidos.

 

De menor antigüedad es la bodega Adega Eidos, surgida en el año 2000 con la firme vocación de recuperar la tradición ancestral de la elaboración del vino. No obstante, las particularidades del clima de Sanxenxo quizá sean el principal rasgo de identidad que singulariza a muchas de sus botellas.

 

Con un control riguroso de cien hectáreas de viñedos, Bouza do Rei es una bodega sita en Ribadumia, con instalaciones capaces de albergar hasta 900.000 litros de producción. La uva albariño es la protagonista absoluta de sus caldos artesanales.

 

Hablar de Pazo Señorans es hacerlo del ejemplo perfecto de bodega familiar que, pese a la estrechez de su producción, puede plantar cara a los Goliat de su sector. Comenzaron su andadura en 1989, en una vivienda solariega con varios siglos de historia, antigüedad de la que ‘beben’ sus vinos, mayormente blancos albariños. Especial mención merecen sus orujos blancos y de hierbas.

 

Probablemente, las Bodegas Aguiuncho carecen de una etiqueta con el renombre de otros ilustres del mercado, pero la ‘minoría’ de vinos que producen (alrededor de 150 mil botellas, nada menos) no decepciona a los paladares más exigentes. La variedad de uva albariño es el material base con el que operan desde su fundación.

Organizador de viajes 

Al final le voy a coger el gusto a esto de organizar viajes para los demás. Como últimamente ya viajo cada vez menos y me estoy planteando dejarlo todo por falta de liquidez, al menos siempre me queda el consuelo de aplicar mis conocimientos para otros. Como mis padres querían hacer un viaje especial y no sabían muy bien a dónde ir, me ofrecí a organizarles algo yo mismo. Como saben que yo he viajado bastante y les conozco bien me dejaron vía libre para organizarlo a mi modo.

Y entonces empecé a pensar a ver dónde los podía llevar. Tenía que ser algo no muy lejano ni demasiado ambicioso, porque tampoco quieren ya grandes complicaciones. Tampoco me apetecía que fueran a los típicos destinos estilo Imserso, que están muy bien, pero para eso está el Imserso. Y debía ser algo que les gustase de forma un poco más específica. Entonces pensé en un viaje por las mejores visitas bodegas albariño

En principio, me pareció una gran idea por varias razones. Para empezar porque mis padres son unos grandes aficionados al vino… al vino bueno, como todos los verdaderos aficionados. No sé quién dijo una vez que la vida es demasiado corta para beber vino malo. Lógicamente, el vino bueno no siempre está al precio que nos permite la cuenta corriente, pero la frase viene a decir también que mejor poco y bueno que mucho y malo, ¿no? 

Por otro lado, un viaje para conocer las mejores visitas bodegas albariño era algo bastante ligero sin que supusiese un plan demasiado ambicioso como ir a conocer el Himalaya o algo así, que siempre dicen que ya no están para según qué cosas. Y, además, también está la gastronomía para acompañar el vino, que es otra pasión de mis padres… y de cualquiera al que le gusta la buena vida. Así que lo organicé todo con mimo: una nueva forma de viajar… a través de otros, ahora que la inflación y demás provoca que me tenga que conformar con “viajar” al centro comercial los fines de semana.

Guía de compra de vino albariño: ¿cómo elegirlo?

El prestigio del vino albariño ha trascendido las fronteras autonómicas de Galicia, para adentrarse con éxito en los principales mercados europeos. Acertar en su elección no es tarea fácil. Para ello, se recomienda revisar aspectos como la Denominación de Origen, la añada o la reputación de la marca.

 

Existen en Galicia más de 450 bodegas, pero no todas gozan del mismo prestigio. Es garantía de calidad comprar conde de albarei, Pazo Baión, La Mar, Albariño de Fefiñanes, Pazo de Señorans Colección, Do Ferreiro, Martín Codax sobre Lías, Maior de Mendoza Lías o Finca Valiñas.

 

Respecto a la Denominación de Origen, los mejores albariños ostentan en su etiqueta la D. O. Rías Baixas, una de las 96 Denominaciones de Origen Protegidas existentes en España. Cierto es que se comercializan albariños de calidad regular y precio económico sin este reconocimiento del origen de la uva utilizada. Esto se debe a que la variedad de uva empleada en el vino albariño se cultiva prolijamente fuera de las Rías Baixas, lo que altera drásticamente el sabor y el aroma del producto resultado. Por consiguiente, deben elegirse vinos con la D. O. Rías Baixas y evitarse aquellos que carezcan de este requisito.

 

Por otra parte, la añada es otra característica que muchos amantes del vino tienden a pasar por alto. Peor aún es cuando el consumidor, tras estudiar la etiqueta, destaca un albariño porque la añada no era del año anterior. Este es un error mayúsculo, dado que este producto oculta por lo general unas mayores cualidades organolépticas que las de vinos de temporada.

 

Por último, es aconsejable no dejarse llevar por los números de la etiqueta del precio. Algunos consumidores tienden a sobreestimar la calidad de albariños de alto coste, al tiempo que menosprecian la de vinos más asequibles. En sí mismo, el precio no es un indicador de calidad, y en muchos casos se ajusta en función de la exclusividad deseada por la marca.