¿Siguen vigentes los seguros de decesos?

El seguro decesos se paga a lo largo de prácticamente toda la vida. Muchos padres ya apuntan a sus hijos nada más nacer y comienzan a cotizar por ellos. El objetivo de estos seguros es, ni más ni menos, que cubrir todos los gastos que ocasiona el fallecimiento, desde el entierro hasta el alquiler del tanatorio o incluso ayudar en los procesos posteriores, como las consultas legales para resolver el testamento.

Las personas más jóvenes comienzan a preguntarse si vale la pena pagar durante toda la vida para el entierro y muchos se plantean dejar de pagar este tipo de seguros. Pero precisamente ahora, más que nunca, son muy necesarios. Y no es difícil analizar por qué.

Para empezar, los gastos de un sepelio son bastante elevados. Y hoy, son muchos los que no tienen ahorros para cubrirlos. Si alguien fallece y no deja dinero para cubrir los gastos del entierro, tendrán que hacerse cargo los familiares más cercanos, lo que puede suponer un problema para estos. ¿De verdad es ese el recuerdo que queremos dejar en los nuestros?

Una de las cosas que aumenta el gasto del sepelio es que los velatorios se hacen en salas que se alquilan para este fin en los tanatorios. Antiguamente, se velaba a los muertos en casa, pero esto es algo que prácticamente nadie hace ya. Recibir visitas en casa en esos momentos y tener el cuerpo del familiar difunto en la habitación son dos cosas que cualquiera desearía evitar en un duelo.

También es importante no tener que hacerse cargo de nada en esos momentos tan difíciles. El personal de la aseguradora se encargará de todo y, seguramente, esto sea lo que más van a agradecer los familiares directos. El momento del fallecimiento de un familiar cercano es de por sí duro, tener a alguien al lado que ayuda a tomar las decisiones y que se encarga de todos los trámites ayuda realmente mucho.

El pago de este tipo de seguros es por una cantidad muy pequeña, ya que al abonarse durante muchos años es poco lo que toca cada mes. Y, aunque nadie quiere pensar en la muerte, es importante tener cubiertos estos momentos, como lo es tener hecho un testamento o contar con un seguro de vida en préstamos. Son detalles que no vamos a aprovechar para nosotros, pero que nuestros familiares agradecerán enormemente.