Cáncer de cérvix: tipos y estadios

El cáncer de cérvix es aquel que afecta a las células del cuello del útero. En la mayor parte de los casos está causado por el virus del papiloma humano. Existen dos tipos de cáncer de cuello del útero:

-El carcinoma de las células escamosas. Ataca principalmente a la zona más cercana al útero y se forma en las células escamosas, que son las que están en la superficie. Se calcula que el 80% de clos cánceres de cérvix son de este tipo.

-Andenocarcinoma. Ataca a la zona más cercana a la vagina. Se calcula que un 20% de los diagnósticos de cáncer de cérvix son de este tipo.

Cuando hablamos de cancer de cervix estadios nos estamos refiriendo a cuánta zona ha atacado el cáncer, si se ha diseminado por todo ese órgano o si ya ha atacado a órganos cercanos. Existen cuatro estadios, aunque dentro de cada uno de ellos hay diferentes niveles de gravedad.

En cáncer en estadio I es aquel que se encuentra exclusivamente en el cérvix y que no ha llegado al sistema linfático. En el estadio IV el cáncer ya ha atacado a otros órganos por diferentes partes del cuerpo.

Cuanto más cerca de la fase inicial del cáncer nos encontremos, es decir en el estadio I, más fácil es conseguir erradicarlo de una manera exitosa. En el estadio IV el problema ya no es atajable y en la mayoría de los casos, lo único que se puede ofrecer al paciente son cuidados paliativos.

Dado que la vacuna del papiloma humano no parece ser tan efectiva como se esperaba, hoy por hoy la prevención es la única arma de las mujeres para luchar contra el cáncer de cérvix. Las revisiones anuales son fundamentales para poder detectar un cáncer en estados iniciales y tratarlo con las mayores posibilidades de éxito.

En una revisión habitual, el ginecólogo extrae una muestra de células del cérvix para que sean analizadas. De esta manera, si algo va mal, será detectado rápidamente. Del mismo modo, si la mujer percibe sangrados que no se corresponden con su menstruación o cualquier molestia que no sea habitual, debe de acudir a su ginecólogo para que compruebe a qué puede ser debido y descarte que pueda tratarse de un cáncer.

La mayoría de los problemas ginecológicos de las mujeres no tienen como causa el cáncer, pero es fundamental realizarse revisiones.