¿Cambiar o reformar? 

Durante los últimos años nos hemos planteado un dilema de difícil solución: cambiar de casa y vender la nuestra o reformarla. Porque algo debíamos hacer ya que nuestra actual casa necesita un importante lavado de cara. Pero para tomar esa decisión entraban en juego muchos factores, desde el económico al emocional. Nuestros hijos no querían cambiar de casa, por ejemplo, porque los niños siempre suelen sentir mucho apego a las cosas y les cuesta entender de primeras los beneficios de un cambio.

Pero nosotros tampoco lo teníamos muy claro, ni a nivel económico ni emocional, porque tenemos muchos recuerdos asociados a la casa. Tampoco los precios de la vivienda nueva ayudaban a hacernos más fácil la decisión, así que antes de decidir buscamos varias empresas de reformas pisos en vigo para barajar las opciones. ¿Qué precio nos daban por una reforma considerable de nuestra vieja casa? ¿Merecería la pena?

No es fácil adelantarse a los acontecimientos, porque una empresa de reformas siempre va tratar de ver las cosas en positivo, y es su trabajo. Pero el cliente debe leer también entre líneas. Porque hay un aspecto muy importante en una reforma integral: ¿qué haces mientras dura la reforma? Nosotros, por suerte, teníamos una alternativa ya que mi hermano tiene en la ciudad un piso de alquiler vacacional. Habíamos hablado con él y se ofreció a dejarnos el piso unas semanas mientras durara la reforma. Aunque se negó, le pagaríamos un dinero, al menos de agradecimiento ya que durante ese tiempo, lógicamente, no lo iba a alquilar.

Por otro lado, también valoramos el hecho de que estamos muy acostumbrados a vivir en este barrio y de comprar una casa nueva sería en otra zona ya que en la nuestra apenas hay pisos nuevos y los que hay son muy caros. Y teníamos claro que no íbamos a comprar una casa de segunda mano y buscar reformas pisos en Vigo que para eso hacíamos la reforma en la nuestra. Así que al final nos hemos decidido por quedarnos con nuestra casa y reformar. Esperamos haber acertado.