¿Cuáles son las causas de la dermatitis en perros?

Los veterinarios recomiendan el uso de geles y Champu para pieles delicadas perros y gatos, pues sus equivalentes para consumo humano no están indicados para mascotas. Seguir esta advertencia puede evitar afecciones cutáneas tan comunes como la dermatitis.

Y es que la dermatitis en perros puede originarse a raíz del contacto con sustancias nocivas para la salud cutánea de estos mamíferos, presentes en geles y otros productos de uso doméstico. Con frecuencia, la respuesta de la piel es mínima, en forma de irritación leve.

Pero las malas prácticas de higiene pueden inducir una dermatitis en toda regla. Esta enfermedad cutánea se manifiesta con una sintomatología diversa: oscurecimiento de la piel, enrojecimiento de la región ventral, aparición de costras y signos de rarefacción, picor constante y tendencia a lamerse las zonas afectadas o pérdida de masa corporal.

Además del contacto con sustancias irritantes, la dermatitis canina está causada por la acción de los dermatofitos antropofílicos, como el hongo Microsporum canis o el Trichophyton mentagrophytes. Estos ‘enemigos’ de la salud canina también están detrás de la tiña y otras dolencias.

Por otra parte, las alergias ambientales también son un factor causante de dermatitis canina. La presencia o exceso de polen o ácaros en la atmósfera incrementa el riesgo para la mascota de sufrir dermatitis alérgica, variante que no debe confundirse con la dermatitis por alergia alimentaria.

Diferente al anterior, este trastorno se origina en el consumo de ingredientes aparentemente inofensivos que alteran el aparato digestivo y pueden manifestarse en forma de dermatitis.

Además, la actividad de garrapatas, pulgas e insectos es culpable de un gran número de casos de dermatitis canina. En concreto, ocasionan la llamada dermatitis alérgica por pulgas (DAPP) al contacto con la saliva de estos parásitos. Para aclarar la causa de la afección, es recomendable someter al animal a un examen clínico.